La selección española masculina se colgaba la segunda medalla olímpica de su historia, primera de plata. Lo hacía en la cita celebrada en Moscú, lugar en el que únicamente la India, quienes vencían a España en una ajustada final (4-3), conseguían privar a los españoles de la posición más alta en el podium.
Un equipo dirigido por Horst Wein, que arrancaba derrotando por la mínima a la anfitriona; la Unión Soviética (2-1). Continuaría superando con autoridad a Tanzania (12-0), para posteriormente empatar con su posterior verdugo en el partido decisivo (2-2). Un triunfo ante Polonia (6-0) y otro ante Cuba (11-0), aseguraban la presencia en el partido por el título.
El equipo nacional en la capital soviética estuvo formado por: Juan Arbós y Juan Amat (Club Egara); Roca, Javier Cabot, Fábregas, José María García y Ricardo Cabot (Real Club de Polo); Paz, Chaves, Malgosa y Jaime Arbós, (Atlètic Terrasa) Rafael Garralda, Zumalacárregui, Juan Luis Coghen (Club de Campo) y Juan Pellón ( Real Sociedad de Tenis Santander).