Pol Amat se convertía en el primer jugador en la historia en alcanzar los 300 partidos oficiales disputados con la selección española. Lo hacía en un encuentro celebrado en Santander frente a Sudáfrica.
El delantero egarense, elegido Mejor Jugador del Mundo en 2008, debutaba en 1996 precisamente ante Sudáfrica, en un partido de preparación de los Juegos de Atlanta, en los que consiguió la plata.
Además de la de Atlanta, Amat sumó en su palmarés otra plata olímpica, la de Pekín 2008, una Mundial, (Utrecht’98), dos Europeas (Barcelona’03 y Manchester’07) y una en un Champions Trophy (Rotterdam’08), cuatro medallas de bronce (en el Mundial de Monchengladbach’06 y en los Champions Trophy de 1997, 2005 y 2006) y un oro, el conseguido en el Campeonato de Europa de Leipzig 2005.